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miércoles, 8 de febrero de 2012

Un poema de Pedro J. de la Peña (Antología, XXI)


Shostakovich / Rostropovich: C. violoncelo


NORMAS NOVÍSIMAS

Ejércitos de sombras en la tierra irredenta
vagaban por las calles dolientes de la tarde.
    LORENZO MARTÍN DEL BURGO


La fiel caballería fue invitada,
casi en bloque, al gran baile de la duquesa rusa.

Al repicar del alba, los húsares y ulanos
se armaron confiados para la cruenta lucha.
Coraceros y dragones los envolvieron por sorpresa
en una escaramuza sagaz como la niebla.
 
Relinchaban los potros, y en la extensa llanura
retumbaba el zumbido de cascos y metralla.

Entrechocaban los aceros, los sables relucían,
y el cornetín, sangrante, llamó a la retirada
cuando murió el alférez portando el necio trapo.

Un montón de gusanos quedó sobre el terreno
de uniformes raídos y empapados de barro.

                            ©  Pedro J. de la Peña