Visitas

Seguidores

lunes, 24 de febrero de 2014

La existencia verbal

La fuente de los libros es la vida; y darla es su desembocadura. Por eso los libros que no transmiten vida mueren rápidamente. El autor crea alternativas a la existencia en sus utopías, o la satiriza con distopías: ofrenda lo mejor probable o avisa del posible peligro.
El arte lo crea el hombre para el hombre, no el artista para el artista. El autor que permanece vivo es porque da vida al lector, no porque lo distrae de su vida.