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viernes, 30 de mayo de 2014

Pepe Calvo: La dama de los globos


Pepe Calvo: La dama de los globos


Apunte para una dama

Tendida como un barco, con los ojos ausentes,
tal vez soñando estrellas o edenes imposibles,
enamora la dama los ojos que la miran
y despierta erotismos más allá de la carne.
El firmamento alzado sobre la oculta bóveda
diluvia un espejismo que cristaliza en labios,
pómulos nacarinos, cuello que se derrama
como un ebrio torrente fluyendo hacia el enigma.
Su cuerpo de topacio ceñido por el rojo 
clavel de la mañana, tejido como clámide,
oculta el bello cuerpo mientras grita el silencio.
¡Qué beso dejaría como una estalactita
hundiéndose en las sombras que dan luz a la vida:
no hay más fiera belleza que dos cuerpos amándose!
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Poema para una foto

jueves, 29 de mayo de 2014

La deserción

Schubert: Viaje de invierno (El tilo)

Leer en el periódico

Ley de Naturaleza es que el hijo se independice del padre, o el discípulo del maestro, para configurar su propia identidad. Y ley de Naturaleza humana debiera ser que hijo, discípulo y similares mostrasen respeto y agradecimiento por el cuidado recibido durante los años de aprendizaje para esa independencia. 
     Matar freudianamente al padre o al maestro es una necesidad síquica; pero no por eso deja de ser un crimen cuando, en vez del respeto y agradecimiento por tales cuidados, se le descuida u olvida... hasta la hora de recoger el legado de su testamento.
     Somos lo que hemos aprendido y aceptado como propio. Y no parece sino impropio matar, sin más ni más, a quien nos ha hecho y sin el cual no seríamos. Entre los animales existe un equilibrio instintivo en la reciprocidad del "te doy" y el "me das": te doy puesto que me diste; te acompaño porque me acompañaste.
     Tampoco parece muy propio de las personas utilizar la razón para encontrar "razones" inhumanas o animalescas que defiendan el egoísmo de "no voy a dejar de vivir mi vida porque se te acabe la tuya. ¡No querrás que me quede y te soporte mientras te llega la muerte!". 
     ¿Qué mundo insensible es este en el que los padres sienten la necesidad imperiosa de cuidar a los hijos y, sin embargo, los hijos suelen abandonar a los padres cuando ya no los necesitan?
     Poco respeto puede sentir por sí mismo quien no siente un respeto agradecido por aquellos a quienes casi todo se lo debe.
     Cría cuervos y recogerás impunidades.

miércoles, 28 de mayo de 2014

La búsqueda poética

Strawinski: Apolo y las musas

¿Qué busca el poeta -todo artista- sino hallar el nombre definitivo y absoluto de su identidad para otorgarle inmensidad y plenitud? Un yo con los rasgos de un dios, única manera de trascender el tiempo y consumar la transfiguración de la materia.
Cierto es que muchos artistoides se contentan con lograr la fama del aplauso: pero esos nada cuentan para el arte ni para el hombre, y mucho para la artesanía y la multitud. 
Buscar el nombre exacto de las cosas, dilucidar a las criaturas y descifrar el corazón humano es una tarea de gigantes esforzados en reducir el universo a una molécula que lo contenga pleno: el poema, la música, el cuadro. Quienes así obran se dan prestigio a sí mismos y a la Humanidad. 
Lo demás son "literaturas", esnobismos, regresiones: imposturas.

martes, 27 de mayo de 2014

La resiliencia

Vivir es tan difícil como es fácil morir. Pero qué victoria cuando nos decidimos a luchar por la existencia.

lunes, 26 de mayo de 2014

Abecedario amatorio

Leer ambos poemas:

La fuente en la ceniza

Madrigal en la noche

La mística lujuria



A) Pretender explicar qué es el amor es confesar no haberlo conocido.
                                            (No obstante, podemos afirmar algunas cosas:)

B) El enamoramiento es una fascinación irrefrenable provocada por la carnalidad.
C) La desfascinación es necesaria para ver con clara realidad al ser amado.
D) Es entonces cuando se produce -o puede producirse- el verdadero y perdurable amor: 1) al aceptar que ningún ser humano es idolatrable; 2) al asumir la reciprocidad afectiva de derechos y deberes cotidianos, que conducen a una vida dichosa mediante una convivencia comprensiva.
EEl primer principio universal de la naturaleza -y por lo tanto del amor- es la sexualidad, háyala modulado o modelado como quiera la moral social e individual: tierna, apasionada... 
F) Reprimir la sexualidad -otra cosa es controlarla- es una aberración.
G) Por lo tanto, la castidad es una perversión.
H) El amor sexual solamente se aprende en el libro del cuerpo.
 I) El sexo está en nuestra mente porque el cuerpo se lo exige, y si no se satisface provoca disturbios físicos y síquicos.
J) Enamoramiento, amor y genitalidad son más hermosos cuando van juntos; pero la naturaleza no los obliga a coincidir.
K) Dice el poema que "no hay más fiera belleza que dos cuerpos amándose".
Etcétera) Puesto que, contra la propia lógica de la vida, y sin más ni más, mañana moriremos insensatamente, ¿por qué no vivir sensatamente hoy, que significa que la razón vigile la pasión sin castrarla? 

domingo, 25 de mayo de 2014

Alienación

El Gran Gol

Paseaba yo por las calles nocturnas y desiertas, extrañado de tanta paz, silencio y estrellada noche. 
De pronto escuché un grito de miles de gargantas agrupadas en la misma indescifrable voz que, al individualizarse ya desgañitada, distinguí que era la palabra ¡¡¡¡GOL!!!!
Qué tristeza tan grande me produjo la eufórica alegría de esos millones de conciencias, solidarias con un frívolo y certero puntapié -y no donde la espalda pierde su honesto nombre- en un juego tan digno como cualquier combate millonario.
Y pensé: ¡Qué diferente sería el mundo si los hombres mantuvieran tan excesiva solidaridad cuando ven a otros hombres morir, a otros niños morir, a la hambruna meter el gran gol de la gran muerte!
Pero no; el dolor ajeno no tiene tal poder de convocatoria: no hay estadios en los que amontonar ayudas a aquellos cuyo único balón es el del oxígeno que les falta en los pulmones porque el sibaritismo de vivir simplemente cada día con un trozo de pan no ha llegado hasta ellos.


viernes, 23 de mayo de 2014

Traducción (XI): L` infinito. Leopardi / versión propia


La misión del traductor no es traicionar al autor; ni contentarse con la versión literal, ni la libérrima. Su misión es escribir lo que el autor hubiera escrito si su lengua hubiese sido aquella a la que se le traduce. Así, lo que parece traición a la palabra no es sino fidelidad al contenido. Eso es lo que intenta esta versión del poema de Leopardi.

El infinito

Siempre amé esta colina solitaria
y esta espesura, aunque me impide ver
la vastedad final del horizonte.
Pero, sumido en la contemplación,
entre las frondas del silencio siento
sobrehumanos espacios insondables
que me estremecen y a la vez me calman
con un desasosiego serenísimo.
Esa íntima estridencia del silencio
y el viento acompasado transfiguran
mis sentidos y todo es plenitud,
pues me dejan su música el instante
y el tiempo que se fue y ha de venir.
Lleno de infinitud, el pensamiento
quisiera comprender, pero es feliz
mientras naufraga en ese sortilegio.

..................................

GIACOMO LEOPARDI
L’infinito

Sempre caro mi fu quest’ermo colle,
E questa siepe, che da tanta parte
De l’ultimo orizzonte il guardo esclude.
Ma sedendo e mirando, interminati
Spazi di là da quella, e sovrumani
Silenzi, e profondissima quiete
Io nel pensier mi fingo, ove per poco
Il cor non si spaura. E come il vento
Odo stormir tra queste piante, io quello
Infinito silenzio a questa voce
Vo comparando: e mi sovvien l’eterno,
E le morte stagioni, e la presente
E viva, e ‘l suon di lei. Così tra questa
Infinità s’annega il pensier mio:
E ‘l naufragar m’è dolce in questo mare

jueves, 22 de mayo de 2014

Dieta intelectual del ciudadano

Desde que la política convirtió la enseñanza en una falta de educación y los centros docentes en epicentros de la deshumanización social -aunque todo viene de más lejos-, la ignorancia se empeña en considerar erratas en el historial de la Humanidad a Platón, Monteverdi, Magallanes, Rembrandt o Voltaire, en vez de lo que son: oxígeno para el espíritu. 
La música tiene más ruido; la pintura, más manchas; la literatura, peor escritura; la cultura, más analfabetismo. El médico tiene más clientes; el abogado, más impacientes; el famoso, más autómatas incondicionales; el juez, más circunstancias eximentes; la justicia, más leyes incumplidas; las mujeres y los hombres, más noviazgos de una noche y matrimonios de unos meses; los hijos, varios padres y madres; el autonomista, más chovinismo, ciego ante el hecho de que, por la inmigración, las naciones son cada día más internacionales; las iglesias, más supersticiosos; el político, más sordos; el profesor, más enfermos de desafecto, agresividad y desidia. 
La dieta intelectual del ciudadano medio se reduce a los resultados de las loterías y deportes y a una ración televisiva, como si persiguiese la desnutrición mental. Si Dios necesitó seis días para construir el mundo, hoy al hombre le bastarían unos segundos para destruirlo. 
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Una enseñanza deshumanizada

Educación 



miércoles, 21 de mayo de 2014

Chagall y la Biblia


Una vez que el artista ha conseguido su manera, su "estilo",  su seña de identidad, todas sus obras son caminos o regresos hacia o desde sus hallazgos. He ahí por qué suelo pasar de prisa ante las obras de una exposición: luego me detengo ante dos o tres que contienen y condensan los logros. Igual que ocurre al hojear un libro de poemas.
He vuelto a comprobarlo ante la exposición de Chagall y la Biblia: 105 aguafuertes ilustrativos del libro religioso. Unos son hermanos de los otros, y todos llevan el equipaje de El Greco y Modigliani en el estiramiento de la figuración, el infernalismo de Goya y de Van Gogh. 
Ningún mérito quita: es el necesario esfuerzo y el continuo peldaño del artista hacia su arte.

Aventuras poéticas: El viaje de la luz

Presentación de

EL VIAJE DE LA LUZ,

JUEVES, 22  de MAYO,
a las 20:00
en la librería 80 MUNDOS
de Alicante, Avda. del General Marvá, 14

Intervendrán:
Josune Intxauspe
(Escritora y profesora de Lengua y Literatura)
y
Antonio Moreno
(Autor de los poemas)

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Libros recibidos (XXXV): Antonio Moreno

                                                             

martes, 20 de mayo de 2014

Una enseñanza deshumanizada

R. Brooks: Semilla de maldad

Miro el mundo y observo una multitud desorientada, prisionera del dinero y el consumismo, en busca de un lugar confortable en el que acomodar su vacío y su insatisfacción. Sin embargo, sé que, tomados de uno en uno, todos los hombres poseen un corazón entusiasmado y generoso, capaz de dar -y recibir- los mayores gozos y venturas. No obstante, una muralla de invisible ceguera enreda a las personas cuando forman muchedumbre, de tal modo que, olvidada su generosidad, convierten su individualismo solidario en egoísmo autista; tanto que la indiferencia ante el dolor ajeno y la persecución del placer propio son los sentimientos que prevalecen en la sociedad.
        ¿Por qué? ¿Qué sucede para que la inocencia infantil se transforme en la crispada hostilidad de los adultos? Sucede que pasan unos años durante los cuales el niño afianza como personalidad lo que descubre en sus padres y no puede desarraigar la escuela. Sucede que lo que el niño ve en casa es, sobre todo, falta de diálogo, de atención y afecto, lo que le lleva a considerarse, en muchas ocasiones, un estorbo. Sucede que, puesto que es una fuente de conflictos, lo que ve el adolescente en los centros educativos es un destierro, en vez de un regalo con el que aprender estrategias para ser dichoso -porque eso es, o debería ser, la enseñanza-. 
        De manera que, desterrado e inmerso en unas programaciones educativas trazadas por políticos a los que estas les importan tanto como los votantes cuando ya han votado, se pierde y se malogra entre pupitres sobre los que diluvian bienintencionadas materias antojadizas y desorganizadas, fragmentos de un todo inexistente. Y sucede que lo que el joven ve, si llega a la universidad, es a muchos profesores que les imparten unas asignaturas reducidas a la exigua parcela de la tesis que están preparando o publicaron, y que tienen tanto que ver con la realidad humana y la comprensión de la existencia como lo absurdo con el sentido común. Sucede, en fin, que, al final del fingimiento, solo algunos -los mejor dotados, para quienes es innecesario el profesor- son conscientes de que se les ha enseñado a sobrevivir, no a vivir; a repetir teorías, no a comprender la cultura y la vida. Y es que el qué, el cuánto y el cómo debe enseñarse continúan sin resolverse.
        Transcurridos así los años de aprendizaje, el mundo se regenera con unos nuevos seres que viajan hacia un horizonte en el que se dibuja el hacinamiento, el paro y otras ausencias que desembocan en una crisis de identidad. Nuevas generaciones que, salvo las excepciones de rigor, dan lo que han recibido: incompetencia e irresponsabilidad, competitividad y prisa como medio de supervivencia, métodos que exigen distancia y frialdad para con los demás en lugar de calor humano.